martes, mayo 14

De Rafapal a La Quinta Columna: así se financian los canales conspirativos en Telegram | Tecnología

«Si quieres comprar mis libros y mis camisetas, cómpralo», reza la descripción del canal Noticias Rafapal, definido como «periodismo para mentes cósmicas», y que está dirigido a sus 125.000 suscriptores en Telegram. Su última autoproclamada «noticia» dice que «todo indica que Begoña Gómez es la testaferro de su marido, el presidente Sánchez, en una trama de corrupción con el gobierno marroquí» o que el software espía Pegasus, de origen israelí, permitiría al gobierno de Netanyahu «que tiene información privilegiada para derrocar al Gobierno de Sánchez» para el reconocimiento del Estado palestino.

Otro canal, La Quinta Columna TV, que se autodenomina “canal de noticias alternativo”, pide donaciones de otra manera: “Si queréis contribuir ayudando económicamente a la labor de investigación, estudio y desarrollo de La Quinta Columna, os facilitaremos nuestra número de cuenta bancaria. Sus últimos artículos tratan sobre el grafeno en las vacunas, noticias de varias muertes de todas las edades (entre ellas OJ Simpson) que apuntan tendenciosamente a que la causa es la vacuna contra el covid y otras variantes alternativas a las versiones oficiales.

Pese a esta necesidad de información alternativa o no censurada, las opciones de pago por colaboración son muy habituales: una transferencia a una cuenta en el Banco Santander, un bizum en el móvil o un pago online a través de las conocidas plataformas Stripe y PayPal. Con casi 200.000 seguidores, La Quinta Columna es el canal de conspiración en español más influyente, según un nuevo artículo científico titulado La máquina de hacer dinero de la conspiración, publicado por cinco investigadores de la Universidad La Sapienza (Roma), que se centra en el modelo de negocio de los principales canales conspirativos de Telegram. Si bien la mayoría de estos canales tienden a sumarse a lo que sucede actualmente, el enfoque global de este estudio hace que algunos canales más centrados en conspiraciones nacionales, la llamada “facosfera”, no aparezcan como los principales.

Telegram es una aplicación de mensajería que apenas modera su contenido ni coopera con las autoridades nacionales. El 22 de marzo, la justicia nacional española estuvo a punto de restringir el acceso a Telegram en todo el país por un caso de infracción de derechos de autor, pero la información que circula por la plataforma podría ser mucho peor: terrorismo, pederastia o racismo. Aunque, como todas las aplicaciones con millones de usuarios, la mayoría la utiliza para enviar mensajes o contenido normal.

Es difícil saber si la motivación económica es la principal o la única causa para promover teorías conspirativas capaces de atraer la atención de miles de ciudadanos. “Las motivaciones de quienes difunden desinformación pueden ser múltiples y dependen del autor y del tema tratado”, afirma Ana Romero, investigadora de la organización EU DisinfoLab. “En la desinformación climática casi siempre hay intereses corporativos que van de la mano de intereses políticos, por ejemplo. A otros sólo les interesa el retorno económico y aunque es probable que en cierta medida crean lo que dicen, creo que se han convertido en directores y actores de su propia película y en muchos casos pierden la capacidad de separar realidad de narrativa». , añade Romero.

Los investigadores italianos pretendían en su artículo analizar una teoría conspirativa llamada Sabmyk, una evolución de QAnon que promueve una figura mesiánica con ese nombre, con más de un millón de seguidores repartidos en más de 100 canales: “Originalmente, el artículo se refería a Sabmyk Comunidad. Queríamos entender qué otras teorías de conspiración habían surgido en Telegram. No pensábamos que íbamos a encontrar dinero en estos canales”, afirma Alessandro Mei, uno de los autores.

Pero encontraron suficiente dinero y el enfoque cambió. El trabajo se centró en tres formas de “intentar aprovechar activamente a sus suscriptores”, dice el artículo: programas de afiliados (cobrar una comisión por vincular páginas de compra y venta como Amazon o eBay), donaciones y campañas de recaudación de fondos. recaudación de fondos. Las únicas que se pueden cuantificar desde fuera son aquellas campañas en plataformas como Kickstarter o GoFundMe: «La suma de dinero obtenida de los proyectos impulsados ​​por los canales conspirativos es de 84,7 millones de euros, de más de 985.000 contribuyentes», especifica el artículo. .

“La desinformación es muy rentable y es un negocio que además tiene múltiples formas de financiarse”, afirma Romero. “No es nada nuevo y cada vez que veo las demandas económicas creo que utilizan algún tipo de programa de fidelización ideológica. El usuario donante paga una “comisión voluntaria” y el beneficiario de la misma le convierte en colaborador de una causa”, añade.

Cómo se identifican los canales

Para identificar los canales, los investigadores buscaron enlaces o recursos en YouTube, Reddit, 4chan y otras páginas que otros estudios habían calificado de conspirativas. Luego, en una base de datos pública de 120.000 canales de Telegram, observaron cuáles compartían estos recursos y tenían enlaces entre sí. Luego dividieron los hallazgos en cuatro comunidades principalmente lingüísticas: inglesa, alemana, neolatina y la llamada “sabmyk”. En total hay 17.144 canales, de los cuales 8.015 en inglés, 4.854 en alemán y 1.328 en español. El canal más influyente es Disclose.tv. Los investigadores clasificaron los principales canales por su capacidad para influir en cada comunidad, no por la cantidad de suscriptores.

En español, la más influyente es La Quinta Columna, seguida de Rafapal, El Investigador, Covid-1984 y Despertador de la Matrix. Cada uno sigue su propia estrategia particular para financiarse. En el caso de Rafapal, por ejemplo, según Massimo La Morgia, otro coautor, «ya puedes ver abriendo la descripción de su perfil de Telegram un enlace para comprar su libro y un enlace a un mercado donde se venden camisetas». vendido. Creo que fue diseñado por él o para apoyarlo. A favor de Rafapal podemos decir que no parece monetizar en Rumble (una plataforma de vídeos alternativa a YouTube) mediante donaciones.

“En total, las campañas recaudación de fondos promocionados en canales españoles, de los que hemos podido obtener datos, recaudaron un total de 1,6 millones de euros», explica Vincenzo Imperati, también coautor. Algunos de estos proyectos son La Voz de César Vidal —un podcast de un hablante nativo de español—, una conferencia médico-legal o El gran reinicio —The Great Reset, en inglés—, un documental sobre la pandemia. Sólo 245 canales en español promueven este tipo de campañas, lideradas por La Calma Antes de la Tormenta y Médicos por la Verdad México. Estos proyectos y estas cifras son sólo una parte del dinero que aportan estos canales. EL PAÍS se puso en contacto con tres de estos canales para conocer su versión, pero no obtuvo respuesta.

Hay más canales en español que prueban con donaciones: 493 han compartido 362 enlaces únicos a páginas como Patreon o PayPal. Los canales más prolíficos son BLesNoticias, TierraPura.org (aunque su Patreon ya está eliminado) y Despierta Goyim. El marketing de afiliación o los enlaces a plataformas de comercio electrónico son el recurso menos utilizado en las páginas españolas. Sólo 95 canales los utilizaron, en su mayoría Amazon. “Amazon presenta productos estándar como libros, mascarillas y filtros de agua, mientras que en eBay, Etsy o Teespring encontramos una gama de productos cuestionables (escudos 5G, protectores de piedras contra campos electromagnéticos o varitas curativas). La distinción entre las plataformas se atribuiría a las diferentes políticas de contenido de estas plataformas. «Amazon mantiene una política de contenido más estricta», afirma el artículo.

Otras fuentes de financiación

Los investigadores también encontraron otros tipos de fuentes de financiación además de las tres principales. Telegram acaba de presentar sus propios anuncios, cuyos ingresos comparte con los creadores del canal. También existen plataformas externas como Telega.io que permiten a los anunciantes coordinarse con los channel managers; Otro método es enviar visitas a tus vídeos en YouTube, donde los ingresos publicitarios también se reparten entre el autor y la plataforma. Los investigadores también encontraron un puñado de direcciones de criptomonedas, en todas ellas verificaron los ingresos y ascendieron a unos 20.700 euros.

El tráfico a sus propias páginas es el último método encontrado: “Hemos notado que hay muchos canales que promocionan sitios web que contienen páginas de compra y venta o una página de canal en sí. En estos sitios hemos visto que suele haber una dirección dedicada a las donaciones. Allí (fuera de Telegram) hay enlaces a plataformas de donación que hemos analizado, IBAN y direcciones cadena de bloques enviar donaciones”, dice el coautor Francesco Sassi.

puedes seguir La tecnología de EL PAÍS En Facebook Y X o regístrate aquí para recibir el nuestro boletín semanal.